DESDE HOY, DE VUELTA A LA REPUBLIQUETA DE PAPEL... /EDITORIAL DE ANTONIO MOLINA CASTRO
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La Patria boba
Desde hoy, de vuelta a la Republiqueta de papel…
Por ANTONIO MOLINA
· Tras la fiebre futbolera volvemos hoy a la triste realidad nacional, donde la verdad y la justicia valen menos que un atado de cangrejos y dos políticos populistas, de izquierda y derecha, unidos procuran consolidar el Poder Total para alzarse con el país
Concluido el sueño mundialista, al que nos llevó de la mano esta bisoña selección nacional de fútbol a 18 millones de ecuatorianos, debemos volver a la cruda realidad nacional, NO sin antes resaltar la humildad de estos muchachitos que están construyendo un equipo que asombrará al mundo --dentro de 4 años en Canadá y Estados Unidos-- y darles nuestra gratitud por lo que hicieron en Qatar y por mantenernos unidos por sobre nuestras abismales diferencias.
Aquí en el país nada ha cambiado: el gobierno por ser ciego, sordo y mudo, niega que estemos “en la lona”; la criminalidad sigue en boga –ahora los sicarios asesinan a niños hijos de sus víctimas seleccionadas--; el narcotráfico continúa hacia América y Europa; crece la captura de alijos de cocaína; la Asamblea Nacional dejó de legislar para convertirse en nido de rufianes que no tienen empacho para mostrarse como son y hacer gala de sus miserias. En ese marco, digno del recuerdo (“ven acá para mearte, miserable HDP”) se consolida la unidad de los legisladores que reptan y responden a Nebot y Correa para intentar de cualquier modo, con o sin Constitución, tomarse el CPCCS y poner allí a quienes designen a “su” propio Contralor General del Estado, que diluya las glosas anteriores y se desentienda de los escándalos de corrupción, del ayer, el presentes y del futuro, en que estén envueltos nebotsistas y correístas.
El entendimiento va más allá de la elección presidencial futura: En la Asamblea debe aprobarse ese borrador de “La verdad jurídica” con los insumos de la Corte Nacional de Justicia, de la Corte Constitucional y del CPCCS (que ya circula) sobre la supuesta persecución al correato con la “justicia politizada”. Glas es el primer acto de la obra teatral: Gracias a un juez especializado en liberar a delincuentes (así dice su record), El ex vicepresidente está libre NO porque ser inocente sino por un artilugio de la ley que concede la libertad al cumplir el 40% de la condena, en su caso por rebaja de sus dos condenas unificadas (6 años por asociación ilícita para delinquir y 8 por cohecho), lo que NO le da derecho a NO devolver absolutamente nada de los 33.3 millones de dólares de indemnización que debe pagarle al Estado por las corrupciones ejecutadas con Odebrecht.
Los eventos científicos-jurídicos celebrados en Guayaquil apuntan a que RC sea declarado dueño de una pureza absoluta, por gracia de la inmaculada concepción; que lo vuelven inocente en la causa penal seguida en contra suya y de su pandilla, por los sobornos que recibió de los contratista del Estado durante su administración, por la que está sentenciado y prófugo. La idea fundamental del correísmo es imponer en la sociedad a RC como víctima de Lawfare (guerra jurídica o ley politizada) aduciendo que en Ecuador está politizada la justicia, pero sin reconocer que lo fue desde cuando él fue mandatario, quien los sábados dictaba sentencia desde la tarima y los procesos los iniciaban los lunes los jueces de bolsillos que él manejaba, a través de su secretario Mera (en prisión) y el Consejo de la Judicatura.
Los tiempos, que no se dieron en el último partido que jugó la selección nacional contra Senegal, en Qatar, parece que sí se están forjando en la Asamblea Nacional donde correístas y nebotsistas hacen –paso a paso-- lo que se les viene en gana. Lo que no terminamos de entender es si Nebot trabajará por la Presidencia de Correa o éste le facilitará convertir en realidad el sueño que le frustró en las urnas el populista Abdalá Bucaram con el 54% de votos, el domingo 7 de julio de 1996, de cuyos efectos, 26 años después, aún no logra reponerse el anciano líder socialcristiano, quedando eso sí bien claro que ambos, Correa y Nebot, se procuran el Poder total en esta Republiqueta de papel para repartirse lo que queda del país…
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