ENTONCES ARRESTEN A ABDALÁ, DAHIK Y TODOS LOS QUE SE LLEVARON MILLONES DE DÓLARES
Las leyes en nuestro país solo se aplican para los pobres, ayer una señora de 73 años, ciega, con insuficiencia renal crónica, reaumática, con neuropatía, diabetes, dependiente de insulina de por vida y con daño en los huesos de las piernas que le impiden una libre movilidad fue detenida y llevada a la penitenciaría del litoral.
Juzgada sin ser notificada para que pueda defenderse y sentenciada por un delito de hace 20 años.
Al parecer, no dieron dinero en el proceso, pero el Juez le dio medidas cautelares inmediatas en un lugar que ella no merece, primero por ser adulta mayor, segundo por ser discapacitada, tercero porque es una señora que depende de otro para todas sus necesidades.
¿Cómo puede ser justo que los políticos delincuentes entren y salgan de las cárceles del país, corruptos que compran su libertad pagando a los jueces por sus fechorías?
¿Así como a esta pobre señora la llevan presa por un supuesto delito de hace 20 años, entonces metan preso a Alberto Dahik y Abdalá Bucaram? Ellos sí se llevaron millones de dólares y fue también hace décadas o ¿no se acuerdan?
AQUÍ LA HISTORIA
María Eulalia Sanipatín fue ingresada a la Penitenciaría del Litoral, luego de que este lunes, en un patrullaje de rutina, se descubriera que ella tenía una boleta de captura vigente, pues había sido sentenciada hace 20 años, a cumplir ocho años de cárcel por PECULADO.
Se bajaba de un taxi informal donde había ido a comprar sus pañales y cuando retornaba a su casa se encontró con el operativo policial.
Ella no portaba su cédula, pero como se la dictó al policía y este revisó en el sistema comprobaron su identidad.
De ahí la llevaron a la Policía Judicial y le hicieron el chequeo médico de rutina, el doctor dijo que a ella, por su condición no podía ir presa, así que le dieron arresto domiciliario esa noche (lunes)”, contó Juana Ochoa, hija de María Eulalia, quien ayer acudió a la Penitenciaría con las medicinas de su madre, pues cuando ingresó no le permitieron llevar nada.
La familia hizo un pedido formal para entregar los ocho medicamentos que la adulta necesita, por la retinopatía y neuropatía que padece, pero no había una respuesta de la institución.
María Eulalia fue cajera en el hospital infantil Francisco de Ycaza Bustamante, hace 19 años y hubo una investigación por el robo de 400 dólares, pero asegura que nunca se le comprobó nada y ella siguió con su vida hasta el lunes.
“Fue investigada con otro cajero, por un faltante en la caja y por un robo sistemático. Los despidieron, pero mi madre puso una denuncia y un tiempo después la tuvieron que indemnizar por despido intempestivo y le pagaron”, relata Ochoa, quien explicó que el martes su madre fue llevada a una audiencia que se desarrolló de forma virtual.
Solo el policía pudo entrar a la sala, la respuesta del juez fue que como ya había una sentencia ella debía ir a la Penitenciaría, contó la familia de la mujer que permanece recluida en el área de mujeres.
“En la cárcel no la querían recibir por su estado, porque en el patrullero se desmayó”, contó Juana entre lágrimas.
Explicó que al parecer la investigación por peculado se habría reactivado en el 2012 y habrían juzgado a su madre sin que ella se enterara.
El abogado Hernán Ulloa conoció el caso este miércoles y se entrevistó con la familia, quienes están desesperados y temen que Sanipatín no sobreviva muchos días en la prisión.
Ulloa este miércoles presentó un recurso de habeas corpus para sacar lo más pronto posible a la mujer, de la Penitenciaría.
Él mencionó que más allá de la pena o si es o no culpable, María Eulalia por su condición, no puede permanecer en la cárcel.
“A esta mujer la sentencian a 8 años por 400 dólares”, recalcó el abogado y manifestó que ella tuvo en algún momento del proceso un defensor particular, pero que este no la habría asistido en el momento del juzgamiento ni tampoco se habría considerado su casillero judicial para notificaciones.
Según Ulloa, esto podría causar la nulidad del proceso contra los cajeros.
Apelo a los Derechos Humanos que defienda y proteja la integridad de una esta señora de la tercera edad, discapacitada e inocente.
¿Dónde está la ley??
¿Dónde están los Derechos Humanos??
¿Dónde está el derecho??
La ley siempre funciona con los pobres!!!.
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