SI EL IESS Y BIESS NO SOLUCIONAN LAS NOVACIONES A LOS JUBILADOS, RESTARÍAN VOTOS PARA LA REELECCIÓN DE NOBOA
El gobierno del joven mandatario tiene entre sus manos, más que el lío promovido con la adusta Vicepresidenta, “nudos gordianos”, que no puede desatar, así como lo fue para otros gobiernos, desde muchos antes y después, de la “década ganada”.
Esos “nudos gordianos”, como dice la leyenda griega, ocurrió en la ciudad de Gordium, en Frigia, (actual Turquía), donde una carreta de bueyes debía llegar al templo de Zeus, pero el elegido para conducirla, Gordias, había hecho un nudo tan difícil de desatar que le impedía cumplir su deseo de entregar la carreta al oráculo. Tuvo que llegar Alejandro Magno, para solucionar el problema, cortando el nudo con su reluciente y poderosa espada.
En la actualidad, el término “nudo gordiano”, se lo utiliza para referirse a un problema difícil de resolver, o un obstáculo que es imposible de superarlo en el menor tiempo posible, por parte de un iluminado burócrata, o un grupo de gran experticia y probidad comprobada, en el área de la seguridad social.
Lo anteriormente relatado es aplicable a lo que sucede en el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, IESS, y su organismo dependiente en el orden financiero, el Banco del IESS, comúnmente llamado BIESS.
El registro histórico – político de ex directivos al frente del IESS y del BIESS, se acerca a un centenar, en los diferentes gobiernos, llegados con un perfil profesional que impresiona a los gobernantes de turno, pero que hasta ahora no logran la meta con éxito, y se retiran derrotados a los pocos meses, en los cargos directivos; pero también existen otros que no les importa quedarse más tiempo, por la jugosa remuneración que reciben.
En la actualidad, el Gobierno del joven mandatario, ha entregado 2,600 millones de dólares al IESS, pero, asimismo, a la vuelta de la esquina, el IESS compró bonos al Estado por 2,235 millones de dólares. Es decir, continúa siendo la “caja chica” de los gobiernos para resolver sus múltiples problemas presupuestarios.
En esa nefasta ruleta rusa, ni el IESS, ni el BIESS, pueden ordenar sus finanzas, y los afiliados y jubilados no pueden recibir las compensaciones a que se han hecho merecedores, después de aportar por más de 20, 30 o 40 años a los organismos de la seguridad social en el país.
Y lo peor de todo, el IESS y el BIESS, cuentan en sus organigramas administrativos, con DIRECTORIOS, donde se incluyen representantes del Gobierno de turno, representantes de los empresarios, y representantes de los trabajadores, a los que se unen una extensa nómina, que hace supremos esfuerzos, como salvadores de la Patria, para atender, entre tres y cuatro millones de afiliados y jubilados del país.
Los afiliados y los jubilados reclaman en calles y plazas atención a sus enfermedades, así como recursos económicos para paliar la crisis energética, pero sus reclamos caen en los oídos sordos de los burócratas que no los escuchan, por lo que en algún momento, podrían ocasionarse una protesta social de imprevisibles resultados, a nivel nacional.
Por lo pronto, el joven mandatario, tiene en sus manos, el nudo gordiano del IESS y del BIESS, y de no resolverlo, será su caída en el próximo proceso eleccionario que se avecina, por no atender las necesidades de los ancianos que no cuentan con apoyo estatal, muchos de ellos con familiares con enfermedades catastróficas.
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Responsable:
Francisco Medina Manrique.
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